Los tratamientos con rellenos dérmicos no son tardados. Dependiendo de la zona y de la indicación, tardan de 15 a 45 minutos, aproximadamente. En ocasiones se administra un tratamiento de retoque, aproximadamente dos semanas después del tratamiento inicial, para optimizar los resultados.

Algunas personas pueden sentir molestias leves. Muchos rellenos dérmicos contienen un anestésico local (lidocaína) para que el usuario tenga una experiencia más cómoda con el tratamiento. Tú y tu médico pueden decidir si es necesario tomar más medidas para aliviar el dolor.

Pregunta a tu médico si podrías beneficiarte del tratamiento con cualquiera de los productos de ácido hialurónico del catálogo de Galderma. Cuando el médico te pregunte acerca de tus antecedentes médicos, es importante que le des información completa y que menciones, por ejemplo, todos los medicamentos que estés tomando, las alergias que tengas o hayas tenido y su intensidad, y todas las afecciones de salud que tengas o hayas tenido. Tu médico te explicará los posibles efectos secundarios de la inyección de rellenos faciales de ácido hialurónico y qué tan graves podrían ser. También debes informar al médico si ya te has sometido antes a tratamientos estéticos, tanto los quirúrgicos como los de otro tipo.

No deben someterse al tratamiento aquellos que sean alérgicos a los productos hechos a base de ácido hialurónico ni quienes tengan problemas de coagulación o trastornos cutáneos activos como, por ejemplo, inflamación, infección o tumores en la zona que se vaya a tratar o cerca de ella. Antes de recibir cualquier tratamiento de relleno dérmico, habla con el médico acerca de las contraindicaciones, advertencias y precauciones pertinentes.

Aún no se ha estudiado el efecto de los rellenos dérmicos de Galderma en mujeres embarazadas o lactantes, por lo que no se recomienda que los utilices si estás embarazada o amamantando.

Te darán recomendaciones sobre los cuidados que debes tener después del tratamiento. Es normal que presentes algunas molestias después del tratamiento, como enrojecimiento, hinchazón, dolor, comezón, hematomas o hipersensibilidad en la zona tratada. Estos efectos secundarios generalmente desaparecen durante la primera semana después de la inyección.

Hay otros efectos secundarios que pueden presentarse con los rellenos dérmicos hechos a base de ácido hialurónico. Debes hablar con tu médico acerca de los posibles riesgos del tratamiento. Después del tratamiento, a veces es necesario aplicar un tratamiento de retoque para obtener un resultado óptimo.